soledad

“¡Necio! Esta misma noche
te reclaman el alma”

Aproximadamente…
Antes de que aun lo supiera
a través de mi mente
todo se había encendido
en un mar de lunas rojas,
cuando el viento gritaba ronco
y el viejo se sentaba
en aquella esquina
a pedir limosna…
en un FUEGO caótico.

y no me lo explico.
Porque en mi hora mas oscura
estuve solo
y en mi momento más calido
extrañe
y extrañe el hueso de mi costado.
Me canse,
me canse de buscarme,
buscarle
de sueño en sueño,
día tras día,
alucinar realidad.
Realidades.
Como si fuera fácil.